sábado, 20 de noviembre de 2010

Casas de La Esperanza (I parte)

Antes de nada queremos agradeceros que hagais tantos comentarios en el blog. Nos encanta comprobar que lo seguis y para nosotros es una forma de saber que estais ahí. ¡Gracias!

El miércoles 17 hemos recibido la visita de Ángel, fundador de la ONG Casas de La Esperanza junto a su mujer Judith. Al conocer a Ángel comprobamos que como voluntarios formamos parte de un proyecto personal.

Ángel y Judith vinieron a Nicaragua para colaborar con la ONG La Esperanza de Granada. Una asociación que trabaja en la educación de l@s niñ@s y jóvenes de esta ciudad.

Trabajando con ellos conocieron el barrio de La Prusia, a sus familias y su problemática y plantearon a la ONG realizar un proyecto en este barrio. Por diferencias con las directrices de la asociación decidieron crear una rama independiente llamada Casas de La Esperanza, cuyo objetivo principal era proporcionar una nueva vivienda a las familias de La Prusia y terminar con las chabolas del camino.

Para alcanzar este objetivo se pusieron en contacto con una abogada y tasaron un terreno del barrio por un precio justo. Compraron el terreno con una capacidad para 35 viviendas de 42 m2 cada una (36 m2 + 6 m2 de porche). Se hizo una casa-modelo (la actual clínica) para calcular el dinero que costaría cada vivienda resultando un total de 1.000 dólares, costo que se vio incrementado hasta llegar a los 2.500 dólares debido a la dureza del suelo que resultó ser piedra arrojada por el volcán Bombacho, que estropeaba constantemente el tractor y al encarecimiento del material de construcción.

Recorrieron el camino hablando con sus gentes para ver quiénes estarían interesados en adquirir una vivienda informando de que se les facilitaría esa cantidad en forma de microcrédito por los materiales. Para acordar un precio mensual a pagar por las familias se reunieron con ellas y se decidió que 5 dólares al mes sin intereses era un precio asequible. Y se establecieron unos requisitos y unas condiciones:
  1. no podían tener ninguna propiedad
  2. las familias tenían que colaborar en la construcción
  3. al tener su vivienda terminada tirarían la chabola en la que habían estado viviendo.


Chabolas y sanitarios construidos con madera, chapas de metal, plásticos y láminas de zinc.

La construcción comenzó en el verano de 2005 y finalizó en enero del 2009. A día de hoy hay 36 familias viviendo en el proyecto llamado ACE 1. Sólo las 3 primeras tiraron su chabola y la mitad está pagando los 5 dólares mensuales. La otra mitad no paga por dificultades económicas por no tener trabajo o simplemente porque “si el vecino no paga yo tampoco y así me puedo tomar más tragos de guaro” (= bebida alcohólica hecha a base de maíz y término general usado para el alcohol). Además algunas de las familias hacen negocio con su antigua chabola alquilándola a terceras personas (especulación hasta en La Prusia…….).


Casa modelo - clínica


Plaza del mango (Proyecto ACE 1)

A diferencia del camino, en el proyecto tienen que pagar agua y luz. Por el agua pagan el gasto de electricidad de la bomba del pozo, que tiene una profundidad de más de 100 m. El agua es de buena calidad (al menos hasta ahora no ha causado ningún fenómeno intestinal anómalo, ya que es la misma que bebemos l@s voluntari@s, y se hizo un análisis que lo confirma).

Un tiempo después compraron un segundo terreno con capacidad para 80 viviendas (ACE 2). Actualmente algun@s voluntari@s y algun@s vecin@s trabajan cavando las fosas sépticas. Pero la construcción de las viviendas está parada debido a un problema en el diseño que realizó un arquitecto de la escuela de Harvard, que supone un encarecimiento de la vivienda y por lo tanto una mayor dificultad para el pago de los microcréditos por parte de las familias de La Prusia.


Durante este tiempo Ángel, Judith y l@s voluntari@s han ido detectando necesidades en el barrio y se han ido desarrollando otros proyectos paralelos a la construcción.

Continuará……………

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Joer, qué guay, no? Aunque eso de que se les dé una vivienda y no paguen debe de ser un poco frustrante... En fin, ya sabemos que jetas hay en todos los sitios, y allí no iba a ser la excepción.

Me encanta que haya gente con tanta iniciativa y lleven a cabo esos proyectos de ayuda a los más desfavorecidos! bss dsd el polígono!!!!

jandro dijo...

Muy interesante, me alegro de que ,por lo que contais, todo vaya bien.

mami dijo...

Veo que os lo pasais muy bien, aunque os lo currais mucho. Raúl ya tienes color playero. Me hace gracia lo del alquiler de las chavolas, la picaresca por lo visto esta en todos los sitios.